Apócrifo
Me gustaría escribir un apócrifo o algo que solo se pueda
leer en sitios secretos, en tierras donde reine el caos y la anarquía sin
violencia, con todo el amor del mundo.
Me siento
llamado a escribir algo diferente, algo que no se repita, que solo tú puedas
entender y no aburrirte con evidentes comentarios que lo único bueno es siempre
la misma repetición que ya sabíais de ante mano.
Soy un chico muy
corriente que lo que pretende es contaros algo,
algo que no cause ningún tipo de desorden emocional, pero eso no está en
mis manos si no en vuestras mentes. Saber controlar las emociones y la fuerza
mental es un reto importante en estos tiempos.
Cuál es la fantasía
de un loco, de un loco, que no tiene donde agarrarse y ve como se fija un
lucero en forma de mujer amable. Lo peor de la locura es la fantasía sin su realidad cercana, que se escapa en las
manos de la desolación, el infortunio, la ruina y tantas cosas malas que
golpean al corazón del corazón poco cuerdo entregado. Yo reconozco que un loco,
no es un peligro, un peligro es un chulo, un loco puede ser un maestro, un
chulo es arrogancia, un loco es romanticismo, un chulo es machismo y así me
estaríamos todo el rato criticando a ese chulo que solo hace vacilar al loco
creyéndose un cuerdo.
Son tantas
injusticias que se cometen, que no dejo a veces de poner el grito en el
cielo, que se le va hacer tenemos que
dejar correr tantas cosas. Son tantas miradas que se te van quedando en la
retina y el recuerdo, no dudas si no olvidas por momentos y te confundes de lo esencial que sería ser más superior a
uno mismo en comparto con los demás.
Dejas de ser lo
mejor de ti, para ser lo mejor a los demás y viceversa, ser siempre alguien con
sueños, con buenos propósitos. Que cojones, también tenemos nuestro lado oscuro,
y las ganas de tirarnos al monte de dejarnos llevar por los instintos bajos,
las corrientes más perversas del hombre, querer lo mas pecaminoso y besar por
todo los rincones de la lujuria desenfrenada. Somos seres amantes del vicio, de
la carne, de todo lo que nos prohíben los curas con su celibato
Las nuevas
generaciones sueñan como soñaba yo en aquellos tiempos, mezclado en humo con mi
cuba tilla, rodeado de chicas insinuadas con su perfume que aún se recuerda.
Ahora cambia un poco todo, se lleva el botellón y las fiestas quedan
reducidas solo al sábado por la noche.
Nunca he llegado
a la universidad, he disfrutado de sus fiestas de estudiantes en Vigo, en
Salamanca, la verdad son fiestas de lo más salvajes, episodios en el que el
estudiante encomienda todo su ser al servicio de las sustancias que se suelen
consumir en la nocturnidad.
A mí siempre me gustaría
ser un estudiante de cualquier materia, por ejemplo, alguna rama de filología o
algo que termine en guía y que me haga sentir realizado, como una persona
culta, espabilada, con ganas de disfrutar de cada momento sin ningún tipo de
desarreglos.
Es difícil que
alguien como yo quiera escribir como, intente al principio, como un escritor
profano o como alguien innovador, para que negarnos, transformar mi vulgaridad
es muy difícil, puede que tenga algunas facultades para impresionar un poco, en
momentos puedo parecerme a esa hormiga que está recogiendo su alimento en
verano, con el peso 10 millones de veces mayor que su cuerpo, pero aun así no deja de ser una
hormiga normal y corriente que no se destaca de la reina o de la guardiana.
Procuro
transformarme en un mar de situaciones negativas, volverme como un faquir que
no se pincha y luchar contra el dolor que produce el desaliento. Si
correcto, este blog no es para machotes
ni gatas valientes, solo para gentes que tropiezan muchas veces y se tienen despertados
en el dique seco, con sed y sin agua.
Ni tampoco está dirigido todo lo que escribo para el rico que
no comparte, bien lo saben los humildes que van a cuba y vuelve con pena en el corazón,
la tristeza al servicio del turista el poder del dinero frente al pobre. No sé
por momentos se me encoge el corazón, al ver muchos detalles en la ignorancia
del gallego, que es mundial.
El mundo automático,
la vida moderna, los desvanes desaparecidos, la línea recta, las tardes de
domingo y las faltas de estilo, suelen ser factores que detesto en estos
momentos que escribo. Si tuviera más léxico o fuera más loco de la cuenta escribiría
con lenguajes llenos de rigor y de sabiduría, rico en léxico que nos proporcionaría una
elocuencia acojonate y que. Que pretendemos hacer a veces que solo nos lea la
gente considerada con estudios a mí me gustaría que cualquiera persona, desde
un bar con una tableta o cualquier dispositivo se conecte, sea joven o viejo.
Yo no digo que le guste esto pero que sienta curiosidad y que pueda coincidir o
por lo menos que entretenga algo, no sé, no vamos a negar de que no es fácil contentar
a la gente y tener siempre los mismos seguidores en la estadística de tu blog,
pero por lo menos se que unos pocos estáis ahí, soportando mis tertulias y
hasta ahora me gusta mucho y disfruto cantidad, como esto va por etapa nunca se
sabe cuál será lo próximo.
ME GUSTARIA
QUE LO PROXIMO…NUEVAS ENTREGAS!!
pablo
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