No quería volver a escribir pero siento la necesidad de
comunicar algo. Algo que no nos deje bloqueados y que nos deje actuar por lo
que queremos. La realidad es que al final siempre nos dan lo que ellos quieren
por lo poco que nos queda.
Estamos acostumbrados a usar y tirar. Cuando al final podemos vivir
con accesorios de más calidad, usamos el ipod para clavar puntas, el mercedes
para ir a las castañas y las mejores camisas de marca combinadas con pantalones de mercadillo, con sus respectivos
calcetines.
Es lo que se suele llamar buena vida,
pero uno no se acostumbra a lo bueno, porque antes el colchón era la disciplina que la mala vida nos tenía
sometido. El libre albedrio del bienestar, acaba pronto y te acabas
acostumbrando a una vida que no era tuya a no ser que la heredes.
Las diferencias de clases, cada vez nos
tienen más divididos, y si uno tiene algo de tendencia clasista, se lo ponen a
huevo. Yo para ser rico me tendrían que lavar el cerebro. Don dinero compra
todo, yo prefiero estar en mi línea, ayudar cuando puedo, al que más lo
necesita.
Es curioso, cuando un ipod empieza a funcionar un poco mal, se puede utilizar
como martillo. Tengo uno que puede acabar con la muralla china. Y después está
mi padre con su coche, un mercedes elegante del 1998, aventurándose por los caminos, para coger
castañas.
A todo se acostumbra uno, pero mucho de
todo esto que estamos pasando, no lo deberíamos pasar y nosotros los ciudadanos
no somos los culpables. En esta ensalada que se ha montado no aparecen nuevos
pobres, sino también nuevos ricos que está sacando tajada.
Yo no soy economista, pero el hombre
cuando se metió en las cavernas, no llevaba el ipad, ni la tv por cable y el
único estrés era el del mamut. Estamos en una sociedad consumista, en el que
todo lo queremos poseer, todo nos lo meten hasta por el culo. Y te das cuenta
que da igual un articulo caro que barato, al final todo tiene su caducidad, no está
hecho para durar.
Yo veo a la gente de mi pueblo y sobre
todo a chicos jóvenes, van a los locales de más glamur con sus ropas impolutas,
sacando pecho y luciendo sus mejores poses. Por otro lado tenemos a otra gente
que lleva una ropa y trajes de lo más
sencillo y no pasan por ricos. Y después tenemos gente que ni siquiera sale por
múltiples motivos.
Ya sabéis coger un ipod para
poner un cuadro en la pared y si queréis ir de safari un mercedes familiar del
98. Hoy es lo que ha dado día, nos os pido nada solo os deseo: BUEN ROLLO A TOD@S